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Obra titulada El Silencio Del Ser, del autor Koldo Etxebarria, entregada como premio en el certamen de premios a la mejor edificación de vivienda de la asociación publica AVS.
Obra realizada con nuevas tecnologías que trata de armonizar el espacio urbano. La armonía de las formas y espacios arquitectónicos sintoniza con la armonía que lleva el ser humano en un espacio interior aunando los dos. Creando una unidad de belleza dentro y fuera del ser humano y la arquitectura.
Vídeorealizado por Alex Cerdeño
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Vídeo de la realización del mural de EITB, que se encuentra ubicado en la primera planta de la nueva sede de Bilbao, realizado con nuevas tecnologías.
Este vídeo ha sido creado por Pablo Rodriguez, realizador de Euskal Telebista.
Koldo Mural from Josi Sierra on Vimeo.
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Salón de Actos de la Biblioteca Municipal de Bidebarrieta
Presentación del número de Zurgai dedicado a Ángela Figuera
Intervienen:
José Ramón ZABALA Escritor y ensayista
Rafael REDONDO, escritor y maestro zen
Carmen BERECIARTUA, rapsoda
Pablo GONZÁLEZ DE LANGARIKA, director de ZURGAI
Proyección de imágenes digitales de Koldo ETXEBARRIA, lustrador del número
https://koldoetxebarria.com/
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Participo con la obra Mirada Poética en la muestra Muestra de Arte Contemporaneo por los Derechos Humanos en la que también se exponen obras de Oteiza, Txillida e Ibarrola.
Estará ubicada en la Universidad y en el Parador nacional de Alcalá de Henares.
La muestra estará abierta hasta el 30 de Enero de 2010 .
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La investigación que realizo ahonda en la belleza metafísica, la dimensión esencial del ser humano que, junto al sentimiento, el gozo poético y la armonía, se ubica en el espacio interior del ser humano.
El lenguaje poético, que va más allá de los planteamientos racionales e ideológicos, nos permite acceder a esa zona interior y, de esta manera, experimentar lo que constituye nuestra identidad real, más allá del ego.
El principal recurso poético que utilizo es la figura humana en actitud contemplativa y en silencio, abierta hacia lo que le rodea desde la belleza metafísica interior. La función del arte es despertar, a modo de espejo, esta belleza, experimentarla en primera persona, ya que es una dimensión interna que pertenece a todos los seres humanos.
Los elementos arquitectónicos de las imágenes nos indican que la belleza está en la cotidianidad, donde el ser humano vive habitualmente, en su casa, su trabajo y su tiempo de ocio.
Los espacios silenciosos, enmarcados por las arquitecturas, acogen y arropan a la figura humana contemplativa en una atmósfera de quietud, siendo la luz y el color, que bañan estos espacios urbanos, los que crean la armonía entre el ser humano y el entorno. Armonía de la imagen que apunta a la armonía que se da en la vida real cuando se vive desde la belleza, armonía de la representación como símbolo de la armonía de la vida que se vive desde la unidad que subyace a las diferencias y divisiones que hace la mente concreta.
El arte es un medio para recuperar esa mirada gozosa y poética del ser humano. El arte se convierte así en una expresión de esa vivencia estética interior, vivencia que es más importante que el objeto de arte. Por eso es importante estar atentos y reconocer como propia a la vivencia que se produce en nosotros ante la obra de arte. En este sentido, mis imágenes son poesías visuales que apuntan al observador, que es el verdadero protagonista de la realidad estética.
El arte es útil en la medida que nos propicia ese estado interior. La función del arte es devolvernos al origen de la belleza como experiencia que está en el propio ser humano. La belleza metafísica es un estado interior y la función del arte tiene que ser la de llevarnos a ella vivencialmente.
“La belleza que somos capaces de apreciar fuera es la belleza que llevamos dentro”.
Antonio Blay Fontcuberta
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Edición y narración: Gabirel Esturo.
Poesía: Janire López.
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Edición y narración: Gabirel Esturo
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Contemplación
La belleza está en el observador
Poesia: Janire López
Sentado en el único banco,
mira el lánguido y ancho camino que le presenta el artista y,
verdes y azules se le abren a los lados,
como dos geométricos gigantes,
los abrazos de la ciudad.
En algún momento, petrificado en la sala,
sintió que aquel cuadro lo engullía,
que el frío metal del banco le acariciaba las nalgas
y ante sus ojos se abalanzó el suelo pulido, como lago de seda,
para echarle en cara viejos momentos construidos.
Posó sus manos sobre los muslos con una recién estrenada serenidad,
y trato, con la punta del pie,
de tocarlo
Seda o Hielo,
cerámica,
alfombra de mar,
aterrorizado con la idea de la más mínima grieta.
Levantó la mirada y le pareció que la ciudad se agachaba a abrazarle
a oler su cabello, a susurrarle groserías
pero no oyó nada,
ninguna vibración
ninguna brizna de miedo,
ni puzzles o peldaños.
Miró al cielo y no alcanzó a acertar si era de día o de noche
si hacía sol o tormenta,
y, cautivado por aquella intemporalidad
¿Se conformaría con la irrealidad de otro
o era lícito también imaginar?
Y sólo entonces, cuando,
quieto,
sometido por el autor,
obligado a meditar
amó la soledad como bien saben los poetas,
alzó la mirada al frente y comprendió
qué nadie más que él alcanzaría a ver
lo que el pintor oculta
al final del camino.
Kontenplazinoa
Banku bakarrean jarrita dago
bere aurrean dagoen bide zabalari begira
eta, berde eta urdin zabaltzen zaizkio, albo bietan,
erraldoi geometriko bana bailiran,
hiriaren beso biak
Egunen batean
margo baten aurrean paratu
eta iruntsiten zatuela irudituko jatzu.
Bankuko metalezko oholaren hotza sentiduko dozu eperdi azpian
eta leundutako zelaia zabalduko jatzu begien aurrean,
zetazko aintzira baten antzera
zuk eraikitakoen islak arpegiratzeko.
Eskuak izterren ganean pausatu
eta behatz lodiaren puntagaz
ukututen saiatuko zara,
izotz ala zeta
ur ala keramika
benetakoa ote den jakin gura
baina arrakalarik txikiena egite hutsak
ikaratuta.
Gora begitu eta hiria
besarkatzen makurtan jatzule irudituko jatzu,
edo ulea usainduten edo lizunkeriaren bat esaten.
Ez dozu, ordea, abots dardararik asmatuko,
ez kurloirik edo usorik
eta zerura begitu
eta ez duzu igarriko
eguzkirik edo lainorik ageri dan,
egune edo gaua dan,
intenporalitatearen sarean egongo zara gatibu,
ikusten duzun irrealidadea behatze hutsagaz konformatu
ala irudimena erabiltea bidezkoa dan
jakin barik.
Inguruak pausu bakar bat eman barik
hausnarrean egoten behartuko zatu.
eta poeten egiten ei duten antzera,
bakardadeagaz maitemintzen ikisten dozunean
aurrera begitu eta
ohartuko zara
bide amaieran dagoena
zuk ez beste inork
ezin duela
ikusi